El Ministerio de Bienes Nacionales creó en el año 2003 un programa de rutas patrimoniales con el objetivo de desarrollar y conservar terrenos fiscales de alto valor natural o histórico cultural, a través de recorridos que amplían y mejoran las alternativas de uso libre y la recreación.
Este es el caso de la Ruta Patrimonial del valle central «Camino Real», recorrido que permite visitar una serie de monumentos nacionales caracterizados por su arquitectura colonial y neoclásica. Dicha ruta cruza nueve comunas de la zona: Mostazal, Codegua, Graneros, Rancagua, Olivar, Coinco, Quinta de Tilcoco, Malloa y San Fernando.
El circuito fue estructurado tomando los 31 hitos del otrora trayecto que existía en la época de la Colonia y que unía a las ciudades de Santiago y Concepción. La ruta recorre 170 kilómetros que comprenden dos tramos: uno que va por el norte desde la Cuesta Chada hasta Rancagua, y el otro por el sur desde la capital de O’Higgins hasta San Fernando.
En el primero se pueden apreciar construcciones de los tiempos prehispánicos hasta la Colonia, mientras que en el segundo se pueden conocer los museos más típicos, como el Museo de la Patria Vieja (Rancagua) y el Museo Lircunlauta (San Fernando) y luego continuar por un camino interior que conecta varias localidades como Olivar, Coinco, Quinta de Tilcoco y Malloa. En el caso específico de Rancagua, la habilitación de dos salas turísticas en la restaurada Iglesia de La Merced se proyecta que ofrezca un circuito patrimonial que genere un gran interés local, regional y nacional. Para empezar este recorrido tiene dos ejes centrales históricos que marcaron época: La Batalla de Rancagua y el crecimiento industrial tras la llegada de capitales extranjeros en la minería.
Rancagua tiene todos los elementos necesarios para ser un destino turístico dado su geografía, historia, rol dentro de la región, principalmente por el valor histórico y patrimonial que tiene con motivo de la Batalla de Rancagua y los procesos de crecimiento industrial que lideró a contar del siglo pasado con la llegada e inicio de las operaciones Braden Copper Company en El Teniente.
Fuente: El Tipógrafo